martes, 19 de abril de 2011

Eyjafjallajökull

Hace unos días, una persona que acababa de conocer me contó que la nube de cenizas del volcán Eyjafjallajökull (juro que no volveré a escribirlo más en este artículo) le cambió la vida. Hace exactamente un año marchó de vacaciones al norte de Italia con la que era su pareja durante los últimos diez años y quedó atrapada por culpa de la nube volcánica sin poder volver a su casa. En ese periodo de tiempo, se dio cuenta de que la relación que había mantenido viva durante un decenio era un cadáver sentimental. Su vida, me decía, había cambiado por un incidente inesperado, por un acontecimiento natural fortuito, un año atrás, como si esa nube, aparte de arrastrar cenizas volcánicas, hubiera arrastrado parte de su pasado.

La crónica volcánica del Almería-Valencia en L'informatiu.

lunes, 11 de abril de 2011

Estados de ánimo

Siempre he pensado que el fútbol es un estado de ánimo. Que los grandes equipos se construyen con los cimientos de una táctica adecuada, unos futbolistas en estado de gracia y una cierta dosis de fortuna, pero, sobre todo, se edifican sobre un estado de ánimo, cercano a la euforia, que arrastra hacia la victoria. El Valencia de Benítez, por ejemplo, no era el conjunto que poseía los mejores jugadores en su época, pero entró, desde la primera temporada del preparador madrileño, en un estado de ánimo alegre que lo llevó en volandas a ganar dos ligas y una Copa de la Uefa. El Valencia de Quique, por el contrario, tenía mejores individualidades, pero transmitía tristeza.

La crónica cinematográfica del Valencia-Villarreal en L'informatiu.

lunes, 4 de abril de 2011

El dolor

Desde hace unos días vivo postrado en un diván a causa de una lumbociática provocada por una hernia discal que, aunque me la diagnosticaron hace muchos años, llevaba más de tres lustros sin molestarme. Una lesión de ese tipo te convierte en un inválido, una persona que necesita de forma permanente ayuda para hacer cualquier movimiento, que procura no mover ningún músculo de su cuerpo para no sentir dolor. La crónica dolorida del Getafe-Valencia en L'informatiu.